Comentario respecto a los mecanismos de participación ciudadana alternativos propuestos en el D.L. 1500
Si bien es cierto, en el Perú, se han iniciado las actividades mineras dentro de la primera fase de la reactivación, lamentablemente los sistemas de comunicación, a niveles digitales, sigue siendo limitado en aquellas zonas donde se pretende desarrollar los nuevos proyectos de inversión.
El 11 de mayo del 2020, se publicó el Decreto Legislativo 1500, que ante el impacto del COVID-19 establece medidas especiales para reactivar, mejorar y optimizar la ejecución de los proyectos de inversión pública, privada y público privada en infraestructura pública y servicios públicos. EL artículo 6 señala que para la implementación de los mecanismos de participación ciudadana se deben de considerar el uso de medios electrónicos, virtuales u otros medios de comunicación, de acuerdo a la Resolución Ministerial N° 304-2008-EM. Así mismo los mecanismos propuestos deberán cumplir con los objetivos de la participación ciudadana efectiva donde la población pueda contar de forma oportunamente con la información del proyecto de inversión con la finalidad que el ciudadano pueda comunicar sus aportes sugerencia y comentarios.
Como es de conocimiento, el nivel de acceso de la población del área de estudio social a los medios electrónicos, virtuales u otros medios de comunicación (radio, televisión, internet, telefonía fija, telefonía celular, entre otros), es limitada, así como también la cobertura, acceso, disponibilidad de equipos y el uso y manejo de los mismos lo cual no se encuentra en las condiciones adecuadas para satisfacer en su totalidad con los objetivos de la participación ciudadana.
El equipo de Dianoia consulting busca darle sentido a los cambios actuales en torno al distanciamiento social, es imprescindible la priorización de los proyectos de digitalización que pretendan establecer puentes entre todos los actores sociales del entorno del proyecto, tomadores de decisiones, activistas, académicos e instituciones de regulación alineados a la necesidad que tienen los ciudadanos de un sistema fiable y abundante de información, así como la importancia de esa información para una sociedad sana y una democracia robusta.